La insuficiencia cardiaca (IC) es un problema de salud de primera magnitud cuya carga para el sistema sanitario y el conjunto de la sociedad ha aumentado en los últimos años1 y se espera que continúe haciéndolo. Debido a la gran variedad de pacientes con pronósticos y opciones terapéuticas muy diversas, se recomienda el abordaje multidisciplinario y establecer modos de organización que lo garanticen (recomendación clase I A)2.
Presentamos los resultados del proyecto MOSAIC (Mapa de la Organización de la Insuficiencia Cardiaca en España), que actualiza y amplía la información relativa a recursos y modos de organización existentes en España para la atención del paciente con IC3 y complementa la procedente de otros estudios recientes de la Sociedad Española de Cardiología4.
Se contactó con 219 de los 246 hospitales identificados (89%) en el catálogo general de hospitales del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad (MSSSI)5; 60 decidieron no participar y se eliminó a 8 por no aportar datos suficientes. Se presenta información de 151 hospitales, recogida mediante encuesta online y contacto telefónico en el último trimestre del año 2011.
Los hospitales se clasificaron en tres grupos de complejidad: primer nivel (sin hemodinámica, electrofisiología ni cirugía cardiaca), segundo nivel (con hemodinámica y/o electrofisiología y sin cirugía) y tercer nivel (con hemodinámica, electrofisiología y cirugía).
Respecto al tipo de unidad de IC, se consideraron dos tipos: generalista (reconocida en el hospital, con un responsable asignado y protocolo específico de atención al paciente con IC) y unidad de IC avanzada (con recursos para tratamiento de enfermos críticos: IC avanzada, evaluación previa al trasplante, monitorización hemodinámica y capacidad de indicación de implante de desfibrilador automático implantable y resincronizador).
Se incluyen centros de las 17 comunidades autónomas y Melilla, con una población total de referencia asignada de 34,2 millones de personas. De primer nivel asistencial son 87 centros (57,6%), 33 de segundo nivel (21,9%) y 31 los de mayor complejidad asistencial (20,5%). La mediana [intervalo intercuartílico] de altas anuales de los hospitales fue 9.220 [4.433-20.648] y la de altas por IC como motivo principal, 409 [156-687]. La figura recoge la proporción de centros con unidad y tipo comparada con la de 20063 (si bien los criterios de tipo de hospital, no descritos en la publicación disponible, pueden diferir). Existe unidad de IC en 56 (37,1%) de los 151 centros. De estas, hay 16 en centros de primer nivel (el 28,6% del total de unidades), 14 (25%) en centros de segundo nivel y 26 (46,4%) en centros de tercer nivel. El 18,4, el 42,4 y el 83,9% de los centros de primer, segundo y tercer nivel, respectivamente, tienen unidad de IC, cifras solo ligeramente superiores (p > 0,05 en todos los casos) a las de 2006. Respecto al tipo de unidad, 26 son exclusivamente generalistas (el 46,4% de los centros con unidad y el 17,2% del total); 12, exclusivamente de IC avanzada (el 21,4 y el 7,9%), y 18 centros cuentan con unidades de ambos tipos (el 32,1 y el 11,9%). Los centros con unidad de IC son más grandes que los que no tienen estas unidades, con mayor número de altas totales —mediana, 18.906 [7.962-30.984] frente a 6.000 [3.498-13.154]— y por IC —661 [358-1.027] frente a 251 [121-493]— y con mayor número de cardiólogos —17 [9-23] frente a 4 [2-9]—. De los 44 centros con unidades generalistas (26 exclusivamente generalistas y 18 también con unidad de IC avanzada), la gran mayoría (n = 37 [84,1%]) dependen del servicio de cardiología y unas pocas (n = 6 [13,6%]) de medicina interna (en 2006, el 91 y el 9% del conjunto de unidades). Participan los siguientes servicios: cardiología en 42 (el 95,5%; el 96% en 2006), medicina interna en 17 (el 38,6%; el 11% en 2006), rehabilitación en 9 (el 20,5%; el 9% en 2006) y geriatría en 4 (el 9,1%; el 22% en 2006), igual proporción que psiquiatría/psicología y asistencia social. Todos los centros, salvo uno, tienen personal de enfermería asignado a la unidad (el 78% en 2006), pero 20 (45,5%) de los 44 centros declaran no tener personal de enfermería a tiempo completo (el 74% en 2006, datos calculados). Son muy variables los programas existentes, la estructura y las actividades realizadas en estas unidades generalistas, como también lo son las tareas asignadas al personal de enfermería (tabla). En el 46,7% de las unidades de IC avanzada (14 de 30), el personal de la unidad no participa en el seguimiento de desfibriladores automáticos implantables y resincronizadores de sus pacientes.
Programas y actividades de las unidades generalistas de insuficiencia cardiaca (n = 44) y responsabilidades asignadas al personal de enfermería
Programas o protocolos que existen en la unidad | |
Programa de rehabilitación cardiaca | 20 (45,5) |
Protocolo conjunto con medicina interna | 19 (43,2) |
Protocolo conjunto con atención primaria | 21 (47,7) |
Programa de atención hospitalaria | 10 (22,7) |
Programa específico de telemedicina | 9 (20,5) |
Se realiza contacto telefónico no estructurado | 5 (11,4) |
Se realiza seguimiento telefónico estructurado* | 6 (13,6) |
Se realiza telemonitorización de datos biométricos con dispositivos a domicilio | 5 (11,4) |
Se realiza teleintervención a distancia con videoconferencia | 1 (2,3) |
Se realiza telemonitorización de dispositivos implantables (DAI y resincronizadores) | 6 (13,6) |
Hospital de día | 28 (63,6) |
Con sillones en la unidad | 15 (34,1) |
Rotan residentes por la unidad | 21 (47,7) |
Responsabilidades del personal de enfermería | |
Educación del paciente y/o cuidadores | 41 (93,2) |
Tareas asistenciales de apoyo (p. ej., ECG) | 42 (95,5) |
Consulta específica de enfermería | 29 (65,9) |
Contacto y filtro telefónico con paciente | 35 (79,5) |
Enlace con médico y enfermería de atención primaria | 31 (70,5) |
Telemonitorización | 11 (25) |
DAI: desfibrilador automático implantable; ECG: electrocardiograma.
Los valores expresan n (%).
En resumen, apenas ha cambiado la proporción de hospitales con unidades de IC desde 20063, lo que indica que hay un amplio margen de mejora para cumplir la recomendación de las guías2, especialmente en los centros de primer nivel. Además, las unidades de similar nivel de complejidad tienen gran variedad de estructuras y servicios prestados. Finalmente, hay un margen de mejora amplio en el papel de las propias unidades de IC avanzada, pues muchas no participan en el seguimiento de dispositivos que las propias unidades han indicado a los pacientes.
Es necesario avanzar en la definición y la implantación de estas unidades, entendidas de manera amplia, permitiendo, al mismo tiempo, la adaptación a particularidades locales e intentando la máxima eficiencia de los recursos asignados.
FINANCIACIÓNEl estudio ha sido financiado por Pfizer S.L.U.
CONFLICTO DE INTERESESA. Castro-Beiras, M. Anguita, J. Comín, J.M. Vázquez-Rodríguez y J. Muñiz han recibido remuneración por asesoramiento en el desarrollo de este proyecto de SANED (empresa encargada del trabajo de campo).
El estudio cuenta con el reconocimiento y el apoyo de la Sección de Insuficiencia Cardiaca y Trasplante de la Sociedad Española de Cardiología. El trabajo de campo lo realizó SANED.